El certificado sucesorio europeo es un documento que contiene la información esencial sobre una herencia; y está creado para su circulación por otros estados de la UE distintos al de su emisión. Es un instrumento jurídico para los ciudadanos europeos que se presenta como documento probatorio para poder acreditar un expediente hereditario o testamento. Y lo hace de acuerdo a la ley nacional del estado en que ha tenido lugar la defunción; validando la adjudicación de los bienes existentes otro estado miembro de la Unión Europea. Además de señalar quién es el heredero o legatario, señala las facultades de los administradores o ejecutores de la herencia. Su expedición se hace por la autoridad competente de un estado de la UE. El notario lo expide.
Uso voluntario del certificado sucesorio europeo
Su uso es voluntario para los ciudadanos europeos y no impide la utilización de otros documentos de la legislación de un estado. Una vez hecho, sus efectos se extienden dentro del estado país de emisión como en los demás países sujetos al Reglamento UE N.º 650/2012, de 4 de julio de 2012. Previa solicitud del interesado o interesados, es competencia del notario que declare la sucesión la expedición del certificado sucesorio europeo
Efectos jurídicos del certificado sucesorio europeo
El certificado sucesorio europeo concreta la eficacia de sus efectos jurídicos en tres aspectos fundamentales:
- Da protección jurídica a los actores de una herencia, herederos y legatarios.
- Constituye un medio de prueba para la sucesión hereditaria.
- Es en sí mismo un título inscribible en los registros públicos. Es por tanto un instrumento jurídico válido para inscribir los bienes de una herencia en cualquier registro público; siempre de los estados miembros de la UE.
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